sábado, 6 de octubre de 2012

Voces de anuncio

Pasando horas muertas (que, por desgracia, cada vez son menos) me han venido a la mente dos spots que por diversas razones han calado en mi memoria y que quiero compartir con vosotros. Ambos tienen en común un voz prodigiosa, dos actores españoles con mayúsculas, uno ya fallecido. Su tono, su forma de recitar, de paladear las sílabas, me causa envidía y admiración a partes iguales.

El primero es de fútbol. El deporte, como ya he comentado en este blog, se presta especialmente a sensiblerías, y el fútbol mucho más. En el subconsciente colectivo de varias generaciones, el deporte rey nos permite conectar con nuestro niño interior, cuando somos mayores... y cunado somos pequeños, compartir algo con nuestros mayores. ¿Quién no recuerda la primera vez que fue de la mano de su padre, su tío, o un hermano mayor, a un campo de fútbol? Compartir colores es compartirlo todo: alegrías y decepciones, abrazos, miradas cómplices, pipas, olor a puro, las colas en el bar al descanso, los cánticos, el frío y el calor, la lluvia, los viajes... Por eso este spot, como no, de la agencia rompedora de este país, una de las más originales y respetadas a nivel internacional, 'Sra. Rushmore', es un acierto pleno. Que un mito de nuestra escena y nuestras letras como Fernando Fernán Gómez le ponga su voz, su carisma y su sentimiento, hacen de este video, algo realmente inolvidable. Es totalmente imposible que un aficionado al fútbol no  vibre con este spot.


Y vamos a por el segundo. También la temática es deportiva, pero en esta ocasión con el motor. La apuesta no es tan original, pero es igualmente efectiva. No es original, por que no lo es su texto. Una golosina irrenunciable para cualquier actor que se precie de serlo. En esta ocasión sustituímos el sentimiento por la épica. Un poema de Ruyard Kipling, el autor del 'Libro de la Selva' y 'Kim', que se titula 'If' o en versión castellana 'Y si...'. La voz en esta ocasión la presta otro gigante de nuestra escena: José Sacristán, con tantos matices como los de su maestro Fernán Gómez. Rugen los motores, ruge la voz del señor Sacristán y a ambos los acompaña la partitura de James Horner, el tema 'A call to arms' (llamada a las armas) de la película 'Glory' (tiempos de gloria).


La verdad es que se me han quedado los pelos como escarpias...  ya no se hacen anuncios como los de antes.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Me gustan las... ¿gafas?

Quizá por que en el fondo soy un creativo publicitario frustrado... (mi primo lo es, creativo, no frustrado,  y es de los buenos), siempre me fijo en los spots televisivos y me gusta disfrutar del trabajo profesional de muchos de ellos. Se trata, en la publicidad, de causar algo al televidente, nunca indiferencia, pero el rechazo es casi tan valorado como el hechizo. Todo esto viene a colación de la campaña de Opticalia, de su nuevo spot. Y aprovechando el tema de las gafas, os enseñaré tres maneras de hacer publicidad.
La primera es la de Alain Afflelou (he tenido que mirar cómo se escribe, lo reconozco). El producto son las gafas, pero también una promoción (el tchin tchin), lo de dos gafas al precio de una (o por un euro más). El mensaje no ha cambiado, y esto ha producido un calado importante y un reconocimiento por que el propio Alain nos lo cuenta en los spots televisivos. Un francés majete, de mediana edad, que irradia clase y confianza. Él nos vende las gafas, él es la marca y el producto. Luego ya están los modelos, los bailarines y la parafernalia, pero es el paisano el que nos dice que las compremos. Y funciona. De hecho, os confieso que en mi casa somos muy mucho de Afflelou... Como decían en una de sus primeras campañas: "Hay que ver que majo es este Afflelelou".

Otro método, similar, es el de General Óptica. Sus spots suelen ser frescos y originales. Sin estridencias, con un mensaje muy claro. El ejemplo es este que os dejo a continuación que, a mi personalmente me encanta. Te vendo gafas por que las necesitas y las que te venda te van a quedar bien. Simplicidad y un objetivo claro.


Más arriesgadas en lo que se refiere a promociones, son las de Opticalia. Desde Miguel Bosé a Dani Martín han protagonizado sus campañas. Personalizar con un icono es arriesgado. Los deportistas suelen ser un seguro, por los valores que transmiten: salud, triunfo, talento... En el caso de otras personalidades como los cantantes, te pueden causar tanta atracción como rechazo. De ahí el riesgo. Pero en Opticalia arriesgan y estos días podemos ver una intensa campaña. Un tanto ridícula, pero de la que se habla. "Me gustan las gafas... adoro las marcas", es una tontería, pero una tontería que cala. El spot te puede gustar más o menos, resultarte cansino, genial o repulsivo. Pero no te deja indiferente. Y eso es un éxito.

domingo, 2 de septiembre de 2012

Divina y Cosmopolita

Vivir en pareja, compartir la posesión del mando a distancia y la estratégica distribución de los canales de televisión se puede convertir en una verdadera odisea. En mi caso suele ganar Gema esa competición amistosa, de hecho en nuestro mando, en la primera decena de canales aparecen 'Cosmopolitan' y 'Divinity'. Algunos podrían pensar que es una concesión mía, en realidad es más bien una forma de fomentar nuestra relación. Lo escribo en serio.

Y es todo gracias a una serie de vergonzosos programas sobre moda, estilo, interiorismo y sentido común básico del que carecen muchos protagonistas de esos programas. ¿Cómo fomenta nuestra relación? Es muy simple; ninguno de los dos puede callarse ante lo que ve en la televisión, es imposible. Con lo cual disfrutamos de risas gracias a una conversación animada con ingeniosos comentarios de uno y otro. Y desde luego no somos los únicos. Los datos de la audiencia de sobremesa de este canal son alucinantes tanto por semana como en el fin de semana y es gracias a estos shows. 

Es una nueva tendencia del docudrama y ¡cuidado muchachos, sí, sí, muchachos, es jodidamente adictivo!. Existen varias categorías que os iré desgranando en sucesivos post, pero hoy quiero empezar con las novias:

El equipo de 'Vestidos de novia de Beverly Hills'
Buscan vestido, buscan entrar en el vestido, buscan poder pagar el vestido... y hay novias para todos los gustos (y sus madres, y sus suegras, y sus novios...). De hecho dos programas de este estilo tienen ya sus spin-offs: vestidos de novias para mujeres de talla muy grande y vestidos de novias para gente podrida de pasta. Digamos que los 'Host', los conductores de estos programas, no tienen un especial protagonismo. Son las novias y sus vestidos los auténticos protagonistas. Vaya dramones. Lo típico es que la chica escoja un vestido carísimo que su madre no puede pagar y ambas acaben llorando como magdalenas. Son programas canadienses y estadounidenses y el horterismo está a la orden del día, mal gusto proverbial, como para hacer un manual. Luego están los añadidos; las dos hermanas que se casan juntas y se envidian los vestidos, el novio que va a escoger el vestido que le guste a él, las siempre terribles suegras, la amiga rancia...

Y está también la versión tengo una talla 40 pero como me caso, a ver si entro en un vestido de la 34... una tarea complicada para la que aparecen el preparador físico cachas que intenta poner en forma a la susodicha haciéndola sufrir un poco por el camino (para deleite de la audiencia) y la nutricionista que avergüenza a la novia, enseñándole la cantidad ingente de porquería que consume, e intentando que cambie sus hábitos alimenticios (algo que seguro que hará exclusivamente el tiempo necesario para que el vestido no le reviente durante la ceremonia...). El novio también colabora hacia el final del capítulo, acompañando a su prometida en una excursión por el bosque, cruzando un río en piragua, haciendo puenting, barranquismo o algo similar, escenificando su apoyo en esa actividad física que  (supuestamente) su novia nunca hubiera sido capaz de completar, de no ser por el estricto régimen y la puesta en forma de nuestros anfitriones-presentadores. Al final la novia entre en el vestido, que le queda como un guante, estiliza su figura y le confiere ese deseado aire princesil que (de nuevo supuestamente) todas las mujeres buscan (al menos las que van a estos programas).

Como suele suceder con estos programas, la verdadera curiosidad comienza cuando acaba el capítulo en cuestión, con comentarios del tipo... "esa recupera todo lo que perdió en la luna de miel" o " uuuuy, que poco futuro les veo yo a esos dos...". Es lo normal, a fin de cuentas estos programas no dejan de suponer la globalización del marujeo. Y si en algo somos buenos en nuestra piel de toro (campeones del mundo, varias veces consecutivas y desde hace centurias...) es en lo de criticar, destripar (verbalmente) a quien se nos pone por delante sin perder la sonrisa.

Así que ya lo sabeis , si quereis sentir verguenza ajena y rajar a dolor, (que siempre es sano para relajarse y rebajar tensiones) estos son vuestros programas.

En próximas entregas seguiremos con el resto de categorías a) ¿Cómo puedes tener un negocio si eres un completo inútil? b) ¿Cómo no se van a reir de tí, si me sales a la calle con esas pintas? c) Te vamos a dejar la cobacha donde vives, como una casa de 'Estilo y decoración'.

miércoles, 29 de agosto de 2012

La mejor serie de policías

Partiendo del hecho de que un servidor se pirra por los juegos de palabras, lo de Southland y yo estaba predestinado. Distrito sur de Los Ángeles, uno de los mayores centros de criminalidad y delincuencia del mundo. La serie, que actualmente cuenta con cuatro breves temporadas, ha renovado para una quinta que se estrenará a comienzos de 2013. Ben Sherman es nuestro cicerone en este viaje a las entrañas de los procedimientos policiales, tanto de los hombres de uniforme, como de los detectives de homicidios. Sherman es un novato, un agente en prácticas recien salido de la academia que aprenderá lo mejor y lo peor de ser un patrullero.

La serie es cruda, dura, y lejos de idealizar la
profesión de policía, nos muestra la realidad de un trabajo desagradable, estresante y muy poco reconfortante. No es una serie procedimental al estilo 'CSI' o 'Bones', es un
drama centrado en unos personajes con más
defectos que virtudes o que, al menos, están parejos. Que son seres humanos, no héroes planos y sin matices. Y las pasan putas bastante, doy fé. En la serie seguimos de manera paralela a dos coches patrulla y dos parejas de detectives de homicidios, al menos así era en la primera y segunda temporadas. En las dos siguientes, el status quo de los protagonistas hace imposible ese hecho, aunque la dinámica sigue siendo prácticamente igual.

'Southland' ha sido una serie que no lo ha tenido fácil, pero por su evidente calidad ha logrado sobrevivir. Aclamada por la crítica, la serie comenzó emitiéndose en la NBC, que la llegó a renovar por una segunda temporada que sin llegar a estrenarse fue cancelada. Como ya se habían rodado seis episodios, la cadena por cable TNT decidió comprar la primera temporada y los episodios rodados de la segunda.  Tras su emisión, TNT, ofreció la posibilidad de seguir produciendo la serie, encargando otros diez episodios para la tercera temporada, operación que repitió para la cuarta y la quinta (en proceso de rodaje).


El cast es de lo más convincente, con Ben Mckenzie (The O.C.) interpretando al bisoño Sherman y a Michael Cudlitz como su oficial instructor, John Cooper. Shawn Hatosy es el detective Sammy Bryant y la verdadera estrella de la serie es una fascinante Regina King, que compone uno de los personajes femeninos más fuertes y reales que haya visto en los últimso tiempos; la detective Lydia Adams.

También son bastantes las caras conocidas que se han pasado por esta serie. Lucy Liu ha sido la última, interpretando a una patrullera en la cuarta temporada. Amaury Nolasco, Lou Diamond Philips, y también cuentan con un actor bastante mítico en un papel secundario y recurrente: C. Thomas Howell.

Y para terminar, el principio. Una gran cabecera que utiliza la versión instrumental de una gran canción de la portuguesa Dulce Pontes: 'Cançao do Mar', cuyo inicio aporta desasosiego, pese a que el tema en sí sea casi la antítesis de la propia serie... una canción de amor:




No estaba muerto...

Estaba de vacaciones. Ya tengo nuevos temas en mente. Empezamos a actualizar en nada...


 Y no, no estaba en este sitio, ahí hay mucha luz.

martes, 14 de agosto de 2012

Un castillo de naipes

La política está de moda. En serio. Tenemos ese bio-pic (aún no lo hevisto pero malicioso, seguro, seguro) de la que fuera aspirante a la vicepresidencia de los EEUU, Sarah Palin. Lo hace HBO con unos estupendamente caracterizados Julianne Moore y Ed Harris. Doy por hecho que dos actores de su talla no caerán en la caricaturación de los personajes y que, aunque no esten sobresalientes, siempre nos dejarán un trabajo muy profesional. También está 'Game change', otra serie que no tengo muy claro si irá de políticos o sobre política, no como 'Boss', con Kelsey Grammer. Esta de política no va. Ha sido una de las triunfadoras de la temporada. En la que 'jefe' del título, un sin escrúpulos y muy autoritario alcalde de Chicago hace cosas, pero no política.

Sin embargo no es de esta series de las que os quiero hablar. Este post está dedicado a un proyecto que se llama 'House of cards', lo que aquí vendríamos a llamar un castillo de naipes. Es una historia de política y políticos, una historia lo suficientemente atemporal como para indicarnos que la avidez de poder en la clase política existe desde siempre, de hecho yo creo que están indisolublemente unidos. La historia tiene dos nombres propios. El de Kevin Spacey como productor y protagonista, y el de David Fincher como director y coproductor. 

Spacey quisiera ser inglés
Me gustaría pensar que 'House of cards' nos va a presentar la parte sucia de la política. La que tiene como protagonistas y ejecutores a los hombres y mujeres que serían el reverso tenebroso de los hombres y mujeres del 'Ala Oeste de la Casa Blanca', esa serie que nos permitió entender de manera amena e inteligente un sistema político, jurídico y social tan complejo como el estadounidense. Esta nueva serie se basa en la novela homónima del británico Michael Dobbs, jefe de gabinete del partido conservador británico y que ya fuera adapatada a la televisión a comienzos de los años noventa del pasado siglo. Aquella primera y excelente serie gozó de cuatro episodios y tuvo segunda ('Play the King') y tercera parte ('The final cut'). En las tres el gran protagonista era Ian Richardson (un cabrón encantador, un cínico inglés absolutamente magnífico) interpretando el papel de Francis Urquhart el hombre que, por cualquier medio, quería llegar (y llega) a ser el Primer ministro británico.

Fincher lo toca y hace oro
La otra pata del banco es el amigo Fincher ('El club de la lucha', 'El curioso caso de Benjamin Button', 'La red social', 'Los hombres que no amaban a las mujeres') probablemente el más personal de los directores que ahora mandan algo en Hollywood. El director adaptará esta serie a la política estadounidense y será, al menos, el director del episodio piloto. Constará de 26 capítulos en su primera temporada y será un show pionero en cuanto a la manera en la que llegue a la audiencia. Lo hará a través de Netflix, la plataforma de distribución vía streaming por internet. Serán episodios de estreno en exclusiva, antes de que una cadena generalista o de cable se haga con sus derechos de emisión. Es una apuesta arriesgada, pero da la impresión de que les han llegado buenas cartas.

Para Spacey no es su primer papel sobre un político. En 'Recuento' (y con un reparto impresionante) interpretaba al hombre designado por el partido demócrata estadounidense para desentrañar (sin éxito) el embrollo de las papeletas servibles-inservibles del Estado de Florida. Para entendernos, aquel fraude que acabó con George W. Bush como el hombre más poderoso de la tierra. En 'House of cards' le tocará hacer de todo lo contrario, pasará de ser el idealista liberal, para convertirse en un depredador conservador.

Yo ya la espero impacientemente.

sábado, 4 de agosto de 2012

El Hombre araña

¡Hombre arañaaa aaaaa! 

Así sonaba allá por los ochenta el tema de Spiderman. Al menos en España. Fue la primera incursión televisiva de este superheroe en nuestro país y la que más huella dejó en toda una generación. 

Este es el segundo post que dedico a los superhéroes televisivos, me aprovecho de la popularidad del estreno cinematográfico de 'Amazing Spiderman'. A finales de semana finalizaré la trilogía de post con Batman, también a rebufo del estreno de la peli en los cines de todo el mundo.

Como aquí hablamos de televisión, vamos a hacer algo de historia, la del hombre-araña en la pequeña pantalla. Peter Parker ha contado con dos encarnaciones 'reales' una norteamericana (1977-1979), que constó de 13 episodios y una japonesa (1978-1979), al más puro estilo Ultraman, o si lo preferís, los Power Rangers...

Sin embargo ha sido en la animación donde nuestro amistoso vecino ha tenido una carrera más longeva y de mayor calidad. Una carrera que comenzó cuando Spidey tan sólo tenía cinco añitos. Sólo un lustro llevaban los lectores estadounidenses disfrutando de sus aventuras en papel, cuando ya se lo encontraron en la tele (1967-1970). El mayor logro de aquella primera serie fue, sin duda, su sintonía, que os ofrezco aquí abajo en su versión original, en la archiconocida que realizaron The Ramones y en una al estilo crooner que interpreta Michael Buble, una versión complicada de escuchar y de encontrar, así que disfrutadla. Ya en los ochenta, la serie que gozó de más popularidad era 'Spiderman and his amazing friends' (1981-1983), hermana pequeña de 'Spiderman' (1981-1982), de la quebebió diseño de personajes y equipo creativo. En la primera, Spiderman ya ha dejado el instituto y vive (al más puso apartamento para tres) con dos amiguetes que resultan ser Bobby Drake (el hombre de hielo de la patrulla-X) y Angelica Jones (Firestar). La serie se convierte en un paseo por todo el universo Marvel (Thor, Daredevil, iron Man, los 4 fantásticos, el Capitán América, el Dr. Extraño...) y quizá en ello resida su verdadero encanto. El éxito de la serie fue enorme, y el personaje de Firestar, creado exprofeso para la serie de televisión, se incorporó a la continuidad del universo Marvel de los cómics... y allí sigue con relativa buena salud.

A comienzos de los noventa se encadenaron tres series con nuestro arácnido amigo como protagonista, que no aportaron nada realmente importante al mito de la araña. La última encarnación, ya con la Marvel en manos de Disney acabó en 2009 sin acabar de enganchar al público pese a basarse en una animación a la japonesa, que tan buen resultado le diera a la Distinguida Competencia con su serie de los 'Teen Titans'.

No ha sido sin emabrgo la última aparición animada de Spiderman, es la estrella invitada en la serie que en este momento goza de mayor popularidad: 'The Avengers, earth's mightiest heroes'. Sigue habiendo proyectos para que Parker, el Daily Bugle, Mary Jane, la tía May y compañía regresen a la tele. No tardaremos en ver como nuestra pantalla se llena de fluído arácnido un día de estos.






domingo, 22 de julio de 2012

¡Que llegan los juegos!


Ya están aquí, este viernes viviremos otra fastuosa ceremonia inaugural. Aplausos unánimes, vaya coreografía, qué sonido, y los artificios... a los dos días, empezarán las collejas: despilfarro, que mira como estamos, que si algo más modesto hubiera sido suficiente... Pero en realidad, el despligue habrá valido la pena, porque además del mayor espectáculo deportivo del mundo, los Juegos son tabién una máquina de mover y generar dinero. Millones y millones.

La maquinaria lleva moviéndose una temporada, y en lo que se refiere a lo audiovisual, a la tele, los británicos no van a dejar a nadie indiferente. Sus promociones, sus spots televisivos de broadcasting y de partnerships (de producción televisiva y de patrocinadores) son de lo mejorcito del año, aunque no es de extrañar. Un deportista siempre vende, y en los juegos...

La idea de este post es ofreceros algunos de los vídeos que más me han llamado la atención, probablemente os deje una parte 2, porque he tenido que hacer mucha criba. De momento van cuatro. El primero es el que realizó la BBC, con algunos preeminentes londinenes para que se perciba en todo el mundo como la City respira olimpismo por los cuatro costados. Es un cortometraje con música, que nadie se asuste.


El tema oficial de los juegos es una composición de los británicos Muse, 'Survival' se llama la canción, el despliegue ostentoso y potente habitual en la banda cambia el mensaje fatalista por uno vitalista. En la ceremonia inaugural, el tema estará intrepretado por Adele y su fascinante voz. Una combinación que me intriga, a ver como sale... Esta es la canción de Muse.


 Y para terminar os dejo dos spots de patrocinadores. BMW, como siempre, tan sutil y fascinante nos lleva hasta la costa inglesa. La marca de relojes Omega, cronometrador en muchas pruebas, tira en cambio de deportistas y de los Rolling Stones... 'Start me up', que podría traducirse libremente por un 'Dame la salida'



Y sí, definitivamente habrá un segundo post dedicado a los juegos. ¿Quereís saber como venden Londres 2012 las distintas televisiones del mundo?, pues os dejaré el ejemplo de la BBC inglesa, la NBC estadounidense, la Sky Sports italiana, Televisa mexicana y TVE, la nuestra.

sábado, 21 de julio de 2012

La patrulla Alpha

Los amantes al cómic siempre hemos suspirado por buenas adaptaciones televisivas de aquellos personajes entre cuyas páginas, problemas e historias hemos crecido. Si bien es cierto que la animación nos ha permitido disfrutar de nuestros Batman, Superman, Spiderman, La Liga de Justicia, la patrulla x-X, los 4 fantasticos, Los Jóvenes Titanes y en los últimos tiempos hasta los Vengadores. Pero también es cierto, que las series de superheroes, con actores, no han tenido demasiada vigencia hasta hace un tiempo. Pero las cosas han cambiado. Sí, es verdad que todos recordamos la mítixca serie de 'Batman' en los 60, o la del 'Increíble Hulk' en los 70, o el 'Gran Héroe Américano' en los 80, o 'Las aventuras de Lois y Clark', en los 90. Pero fueron eso, series aisladas cada década.

Sin embargo, desde el cambio de siglo, series como 'Heroes' o 'Smallville', con su relevancia y popularidad en sus primeras temporadas, han hecho posible que asistamos a una época en la que los héroes con poderes están en la parrilla televisiva y gozando de buena salud.

La heredera verdaderamente privilegiada es 'Alphas'. Creada por Zack Penn (veterano escritor y director en esto de los superheroes e involucrado en prácticamente todas las películas basadas en cómics de la última década). 'Alphas' es una 'Patrulla X' (los X-Men), pero sin pagar royalties. Aquí los mutantes se les denmina Alphas y no dejan de ser más que seres humanos con capacidades especiales. Evidentemente, el público en general nada sabe de la existencia de estos individuos, pero sí las principales agencias gubernamentales. Como os podeis imaginar, aquí también hay buenos y malos (como los bancos). Pero lo que resulta sorprendente y gratificante a su vez, es la enorme gama de grises, de matices morales, que nos plantea, mucho más allá de una serie de acción. En esa paleta de grises se mueve con maestría y ese color metálico, de urbe, cemento y asfalto tiñe la pantalla y también otorga de personalidad en imágenes a esta serie. La eficacia y a la vez sencillez de los efectos especiales es otro éxito de una serie, que creedme, convence desde el primer minuto.

Tenemos al profesor Charles Xavier, quiero decir al doctor Lee Rosen (David Strathairn), un psicólogo al servicio del gobierno, encargado de evaluar a los sujetos alpha como posibles colaboradores o como potenciales amenazas.



Rachel, laboratorio móvil
Gary, internet en el cerebro
Su actual equipo está formado por Gary (el freak residente), autista con tecnopatía, capaz de interpretar e interactuar con la información 'aérea' que pulula por nuestra atmosfera. Es el hacker total, puede acceder a todo sin ordenador, lo que pasa es que el volumen de información es tan ingente como... todo. La otra especialita es Rachel, una especie de CSI ambulante con los cinco sentidos aumentados y una vida social inexistente, precisamente a causa de sus hipersentidos. Ambos aportan también parte de las escenas con humor que destila la serie, especialmente la interacción entre Gary y el cachas Bill Harken. Gary protagoniza una especie de relación paterno filial con el doctor Rosen, mientras que Rachel con la única con la que parece relajarse es con Nina, la otra chica del equipo.

jueves, 12 de julio de 2012

Curioseriales: Gafas bicolor


'Fringe', la serie creada y producida por JJ. Abrams ('Perdidos') tendrá finalmente su quinta y última temporada. 13 episodios en los que básicamente veremos como cierran con más o menos acierto todas las alucinantes tramas paralelas y lelos que nos han vendido a lo largo de todos estos años. La serie, para mi, tiene un mérito enorme puesto que con la mitad de temporadas ha logrado acercarse (nunca igualar), por su estilo y sus tramas a un mito de estas cosas de la ciencia ficción: 'Expediente X'.             

La icónica imagen de Laura Palmer
El amigo Abrams es bastante mitómano como se pudo comprobar en 'Perdidos', si su estreno cinematográfico fue 'Mission Imposible 3', luego se atrevió a revitalizar la franquicia de 'Star Trek' y más tarde realizaría junto a Spielberg una puesta al día de 'Los Goonies' con 'Super 8'.

Pero en una de sus series, 'Fringe' el homenaje definitivo (no se corta a la hora de hacer referencias a la ciencia ficción clásica o a tener en episodios a los actores que han interpretado a mitos como el Sr. Nimoy-Spock , Peter Weller-Robocop o al  Christopher Lloyd-Doc, de 'Regreso al Futuro') se lo hace a la serie definitiva. La que marcó un antes y un después a la hora de hacer, ver y producir televisión. Hablo de 'Twin Peaks', la obra maestra de los años 90 que nos brindó ese loco que responde al nombre de David Lynch.

El Doctor Walter Bishop
Walter Bishop, personaje arquetípico del científico loco, aparece en un episodio, dispuesto a utilizar un método hipnótico con un paciente, para que logre acceder a unos recuerdos a los que no alcanza de manera consciente. En determinado momento, Bishop se pone unas gafas bicolor, rojo y azul, que casi sin darnos cuenta nos recuerdan a algo o a alguien... Después de unos minutos comiéndonos la cabeza, el doctor Bishop suelta la frase que nos ilumina: "voy a emplear el método que perfeccionó un viejo colega mío, el doctor Jacoby...". Simple y efectivo, pero vamos, el acabose (que decía mi abuela).


El Doctor Lawrence Jacoby
Para entendernos, ese doctor Jacoby es Lawrence Jacoby, el psiquiatra que trataba a Laura Palmer en Twin Peaks, y una de las interpretaciones más recordadas del mítico Russ Tamblyn, aquel jovencito bailarín que hacía el doblete en dos de los mejores musicales de la historia de Hollywood: 'West side Story' y 'Siete novias para siete hermanos'. Pues ese es nuestro doctor Jacoby, ese psiquiatra excéntrico, como su colega Bishop, obsesionado por todo lo Hawaianio. En definitiva otro metapersonaje (como Munch), aunque en este caso, casi, sin proponérselo.

Para lo que dan de sí, unas gafas bicolor.

sábado, 7 de julio de 2012

Cabeceras y temas clásicos

No hace mucho recordábamos alguna cabecera 'clásica' de animación a ritmo de Jazz. Preparando aquel post eché mano de la nostalgia y la verdad es que se me quedaron en el tintero unas cuantos opening que también han pasado a la categoría de mito.
 
Es el caso de las tres que hoy os traigo, todas ellas han tenido sus remakes recientes con mejor o peor éxito. Empecemos por la más reconocible de todas. Quizá esta sintonía no puedas identificarla, pero seguro que la tarareas hasta el final. Es 'Hawaii 5-0'.


La serie se estrenó en 1968 y estuvo en antena durante nada menos que doce temporadas. La sintonía fue compuesta por Morton Stevens, habitual colaborador de Jerry Goldsmith. Y le supuso dos premios Emmy (1970 y 1974). El remake actual de la serie conserva el tema original de Stevens, pero con arreglos de Brian Tyler añadiéndole un toque más actual. 


El segundo tema mítico que hoy abordamos es el de 'SWAT'. Que seguro que no os dice absolutamente nada, a no ser que lo identifique por su adaptación al castellano... 'Los hombres de Harrelson'.

Los que tenemos unos añitos encima recordamos con gracia aquella mítica frase... "T.J. al tejado...", menos mal que el bueno de T.J. no tenía vértigo. 'SWAT' sólo tuvo 2 temporadas (1975-76) pero es otra de esas series que pervive en la memoria colectiva. Su tema principal, versioneado hasta la extenuación con versiones dance, techno y progressive, es una composición de la banda de funk 'Rhythm Heritage'. El tema les dió no sólo la fama, también les llevó al nº1 de ventas en los Estados Unidos y acabó proporcionándoles nada menos que un disco de oro.


Una versión más moderna, se puede escuchar en la versión cinematográfica estrenada en 2003 y protagonizada por Samuel L. Jackson y Colin Farrel. Pese a que la banda sonora del film corresponde a Elliot Goldenthal, la versión del tema original es de Danny Saber. 

Y para acabar con mi particular trilogía de clásicos, volvemos a este lado del atlántico. 'El prisionero' nos trae esta larga cabecera, tan mítica como la serie...


Es la más mítica pero también, la más veterana y la menos longeva. Tan sólo 17 episodios, entre 1967 y 1968. Es una de las series que cambió la televisión, su influencia es tan sólo comparable a la de 'Twin Peaks' en los 90 y a 'Perdidos' en los 2000. Todas tienen un componente de misterio, alegoría y una narrativa que cambió todo lo que vendría después.

No es de la BBC, repito, NO ES DE LA BBC, es de la también británica ITV, cocreada y protagonizada por Patrick McGoohan. La banda sonora está compuesta por Ron Grainer, que también escribió el tema del 'Doctor Who'. Una versión en forma de minisere de televisión (protagonizada por Jim Caviezel e Ian McKellen) se estrenó en 2009, con una tibia recepción. No hay rastro en este remake del tema de Grainer.

Y si no teneis clara la relevancia de 'El prisionero', decir que 'Los Simpsons' le dedican todo un capítulo creo que habla por sí sólo.

domingo, 1 de julio de 2012

El Heredero de Clint Eastwood

Hijo putativo del gran Clint, diría yo. Ese podría ser sin ningún género de dudas Timothy Olyphant, algo que ya se nos ocurrió hace unos años en 'Deadwood' junto al gran Ian McShane y que confirmamos en 'Justified'. Esta serie del canal FX es probablemente la mejor apuesta actual por el genero negro-policiaco (junto a Breaking Bad y SouthLand) de la televisión estadounidense. Ya ha completado tres temporadas completas (de 13 episodios cada una) y ha sido renovada por una cuarta, también de 13 capítulos.

Justified, justificado, es como se califica legalmente el incidente que el U.S. Marshal Raylan Givens protagoniza con un mafioso en Miami. El criminal muere de un disparo. Fuego justificado, sí, pero como no ha sido el primer incidente de este tipo, sus superiores han decidido quitarle de la circulación un tiempo, así que lo trasladan a Kentucky, a su tierra. Allí le espera su peculiar familia y sus amistades más que peligrosas. Con su irremplazable sombrero de cowboy, el Marshal Givens sigue repartiendo su justicia particular (muchas veces al margen de la ley) sobre una variopinta galería de criminales como supremacistas blancos, milicias paramilitares, traficantes de metaanfetaminas, atracadores y todo tipo de mafiosos rurales. 

Gran parte del éxito de Justified es su sabor añejo. Givens es el sheriff violento y efectivo, un tipo duro de John Ford pero conduciendo un Lincoln Continental en el Siglo XXI. Otro ingrediente fundamental es su reparto: Primero los Marshal compañeros del protagonista, pero sobre todo, sus antagonistas, principalmente Boyd Crowder, interpretado por el inmenso Walton Goggins (The Shield). Un amigo de la infancia de Givens, una especie de reflejo criminal de nuestro héroe-antihéroe. Como Givens, Crowder también tiene un particular sentido del honor y no es infrecuente verle cruzar las líneas entre lo que está bien y lo que está mal. De hecho lo hace casi tan a menudo como Givens, aunque en sentido inverso. Crowder es el amigo-enemigo perfecto de nuestro protagonista.

Si Crowder es el rival de Givens en la primera temporada, para luego convertirse en una especie de incómodo aliado. En la segunda temporada, su némesis es Mags Bennet, interpretada por Margo Martindale, la matriarca de un clan de mafiosos y extorsionadores, envueltos en una estafa de enormes proporciones en el condado de Harlan, en donde se desarrolla casi toda la acción de la serie. Una antigua comunidad minera en la que conseguir drogas, explosivos y una bala en el estómago, son cosas que están a la orden del día. En la tercera temporada, nuestro malo de turno es un rubísimo Neal McDonough (Hermanos de sangre, Mujeres desesperadas) desatado, histriónico y disfrutando con su interpretación de un estiloso, psicópata y desalmado asesino que intenta hacerse con el control del crimen en el sur de Kentucky. Incluso llega a poner en bastantes aprietos a nuestro protagonista.
 
Y qué decir de las mujeres de Justified. Desde la marshal Brooks a la fascinante Ava Crowder o la bellísima Winona Hawkins. Todas ellas son tan fuertes y carismáticas como sus compañeros de reparto masculinos. Ver eso en una serie policiaca es digno de mención.

Justified nace basada en un relato del maestro de la novela negra Elmore Leonard, 'Fire in the hole'. Leonard, tan satisfecho con el trabajo de Graham Yost, creador y principal escritor de la serie, que se ha convertido en productor ejecutivo de la misma. No le faltan reconocimientos a este show que ha cautivado a crítica y público por igual. Tras su segunda temporada, Olyphant, Goggins, Martindale y Jeffrey Davies (interpretando al pequeño de los Bennet) fueron nominados a los premios Emmy por sus interpretaciones. Martindale se llevaría uno a casa. Justified es, además de una excelente serie western-policiaca, un buen retrato de la criminalidad rural de la américa profunda. La 'Mafia Dixie' del sur estadounidense, de gatillo fácil, camisas de cuadros y música country.

El opening, la cabecera, de la serie es un rap a ritmo de banjo, una propuesta tan original como la serie, que te introduce gracias a su ritmo e imágenes, en el propio relato y que también ha sido nominada como mejor música original a los Emmy. 'Long hard times to come' se titula y esta interpretada por los Gangstagrass y el rapero TONE-z.



jueves, 28 de junio de 2012

Juguemos a los Tronos

Me encanta la gente que tiene el talento y el tiempo para hacer virguerías como estas. Casi estoy deseando que se ponga en marcha la liga. Evidentemente mis chicos, los leones, tendrán que defender el título, y el próximo campeonato promete por que se atisban varios aspirantes... aunque ya pronostico que habrá lesionado de larga duración (ejem, casi definitivas diría yo) durante la temporada.




Sigue, para ver al resto de aspirantes...

sábado, 23 de junio de 2012

Curioseriales: El detective Munch

Munch en pose habitual
Sargento Detective John Munch. Actualmente en el departamento de policía de Nueva York, unidad de víctimas especiales. 

Interpretado por Richard Belzer, el detective Munch, sin haber sido nunca el personaje principal, es historia de la televisión moderna. ¿Por qué? Muy simple. Es un 'metapersonaje'. 

Las aventuras (más bien desventuras) de nuestro protagonista comienzan en Baltimore. En la serie 'Homicide: Life on the street' (1993-1999). Baltimore sí, el escenario de 'The wire'. Y no es casualidad puesto que el genio detrás de ambas series es el mismísimo David Simon. Tampoco la denominada serie entre las series, se libró de una presencia de nuestro hierático investigador.

Detectives Munch y Tutuola (sí, sí es Ice-T)
Durante siete temporadas el detective Munch formó parte del departamento de homicidios de Baltimore. La serie llegó a su fin, pero no así las andanzas de Munch que fue transferido a la Unidad de Víctimas especiales de la serie 'Ley y Orden' (1999-actualidad), en el departamento de policía de Nueva York. Allí sigue después de trece temporadas.

¿Cuál es Munch?
Sin embargo no es por su aparición en estas dos series la que ha elevado a su particular olimpo a este personaje, metapersonaje, como decimos. Belzer, ha interpretado al detective Munch en esas dos series, pero además aparece en un episodio de 'Expediente X' que se desarrollaba en Baltimore. Tiene presencia en otro episodio de 'The wire' como apuntábamos antes. Sale en 'Arrested development', en '30 Rock' y hasta en un episodio del show de los teleñecos ('The muppet show') con muñeco incluido. Todas series de distintas cadenas estadounidenses. Y luego está la puntilla. Una serie de la BBC que ya hemos mencionado en este blog: 'Luther'. En ella, su protagonista se encuentra con un sospechoso que viene de los Estados Unidos. "Llama al departamento de policía de Nueva York y pregunta por el detective Much, él te ayudará", le espeta Luther a su compañero. Es la metaficción. Y Much un hilo capaz de unir 'Arrested development' con 'The wire', 'Expediente X' y 'Luther'. ¿Alguien da más?.

domingo, 17 de junio de 2012

Animación a ritmo de jazz

Hoyt Curtin. Así se llama el genio tras la música de algunas de las más míticas series animadas de la Hanna-Barbera. Fue el director musical de la gran casa de la animación y el compositor de muchas de ellas. Desde Scooby-Doo a los Pitufos, el Oso Yogui, los Picapriedra, Don Gato, Tom y Jerry, los Snorkels, los superamigos... Por si estos títulos míticos de la animación no fuesen suficiente. También fue el compositor de algunos de los temas de varias películas de Ed Wood, incluyendo la legendariamente denostada 'Plan 9 from outer space'.

Este californiano que murió en el año 2000 a los 78 años, tenía formación jazzistica, algo evidente en todas sus composiciones. Si tuviera que quedarme con dos de esas bandas sonoras (cada episodio requería sus propios temas) no tendría mucho que pensar. Esta es la primera, 'Jonny Quest' (1964-65):


Once bólidos inólvidables
La segunda en discordia es una de las series de animación más legendarias de la historia. En ella se percibe el 'espíritu Hana-Barbera' en su más pura esencia. Sólo se necesitaron 17 episodios para convertirla en inmortal. Me refiero, claro está a las 'Wacky races', los 'Autos locos' (1968-69). Aquí el bueno de Hoyt realizó uno de sus mejores trabajos, el ritmo narrativo se ajusta a la banda sonora como un guante. Además de la música, en la serie destacan dos peculiaridades  ya presentes desde la propia secuencia inicial: Por un lado, la presencia de un narrador invisible que interactúa con los participantes y se suma a ese vertiginoso ritmo que la música de Curtin mantiene desde el inicio, y la ruptura de la cuarta pared (la que separa al telespectador de la acción), puesto que los personajes en muchas ocasiones hablan con nosotros, entre ellos el propio Pierre Nodoiunna a la hora de explicarnos sus (¿in?) falibles tretas para ganar alguna de las carreras en disputa.

Como siempre, lo mejor para explicarlo, es que lo paladeeis. Wacky Races, la original, en inglés:


La (también excelente) versión en castellano:


miércoles, 13 de junio de 2012

El incidente canela

Huele a canela...
Tengo más de treinta años. Los de mi generación hicimos un descubrimiento terrible hace ya casi una década. Descubrimos Albacete (Iniesta estaba por aquel entonces en el equipo cadete del Barça...). No es que Albacete estuviera por descubrir, pero de allí era el 'trío de Albacete' (porque eran tres y de Albacete). Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla y Raúl Cimas. Ellos fueron el alma mater de 'La hora chanante... chanaanté'. Un programa de humor del canal por cable 'Paramount Comedy'. Humor bufo, rayando el absurdo que se nutría básicamente de las referencias culturales, pop, deportivas, etc, de nuestra generación. Con independencia de que los distintos proyectos de sus creadores hayan tenido a posteriori mayor o menor éxito. El impacto que produjo ese programa y sus parodias con acento de Albacete, es innegable.

Lo que os pongo a continuación es una muestra de cómo un programa de televisión de hace una década me ha cambiado la vida a mi, y a muchos de mi generación (también hay una canción de 'The Who'...). Es un toque de genialidad absoluta y sin sentido.


El problema que tengo ahora es que da igual donde sea, en la tele, en la radio, en la carta de un restaurante... cada vez que escucho la palabra 'canela', me sale un... pero es... ejem, ya sabéis. Y el caso es que se extiende como un virus. Ya he conocido a gente que lo responde de manera automática cuando escucha la palabra. 

Y sí, tú ya has caído. Puede que sea veneno... pero huele a canela...